La introducción de nuevas aplicaciones de teletrabajo que contribuyen a un mejoramiento de la productividad y la continuidad de los negocios, siempre generará preguntas a quien toma la decisión de adquirirlas y más cuando se trata de avances que implican nuevas inversiones y cambiar el modo que por años se ha usado para llevar a cabo una tarea. Actualmente existe una solución tecnológica de trabajo remoto que por un precio asequible y soporte en tu idioma, te ofrece un sistema móvil, cloud, seguro, que no requiere infraestructura, que puede ser accedido desde cualquier dispositivo, cualquier lugar y que permite la integración con otras aplicaciones; se trata de Google Workspace (antes G Suite).

Quiero probarlo antes
Cuando nos encontramos ante un nuevo producto, probarlo es parte fundamental para la decisión de compra pero, ¿crees que es necesario cuando las ventajas son tan evidentes? Ante cualquier inquietud, firmas como Google y sus agentes certificados están en total capacidad y disponibilidad de guiar a los clientes en las funciones que más le interesen y necesiten, hacerles una demostración orientada, realizar talleres prácticos o sesiones de capacitación gratis para usuarios finales.

¿Es costoso?
Otro factor determinante para hacerse con el servicio es el precio. En el caso de Google, éste se convierte en una objeción debido a la creencia que G Suite se reduce a Gmail, cuando en realidad se trata de un completo paquete de aplicaciones integradas (meet, chat, calendario, docs, drive, etc.), cuyo costo tiende a cubrir toda la inversión de TI incluidas las licencias de Microsoft y otros proveedores, puedes ahorrarte hasta un 70% en gastos a largo plazo.

¿Hace lo mismo que otras soluciones?
Resulta evidente que varios de los programas más utilizados en el mundo, tanto por usuarios «caseros» como empresariales, traen el sello Microsoft. Cuando un empresario o personal de TI se encuentra con Google Workspace (antes G Suite) una de las dudas que lo asalta es si estas tienen las mismas funcionalidades de por ejemplo Outlook y Exchange. La respuesta, para sorpresa de muchos, es un no rotundo pues aunque tenga funciones equivalentes, presenta un modo de trabajar diferente 100% basado en la nube y que también funciona sin conexión, cuenta con actualizaciones permanentes, capacidad de almacenamiento superior, con aplicaciones de productividad y colaboración, una amigable interfaz web y por supuesto, con la facultad de ver, editar y convertir archivos de Office y viceversa. En resumen, se trata de un producto líder y avanzado en el que confían más de 6’000.000 de empresas de todos los tamaños y sectores a nivel mundial.

¿El cambio es tedioso?
El siguiente reparo es el cambio; dejar de lado soluciones in situ para darle paso a un servicio novedoso en constante innovación puede sonar traumático; sin embargo no es así. Lo primero a subrayar es que lo que más toma tiempo es la migración de datos, la cual se realiza en segundo plano para que los empleados de tu empresa puedan seguir cumpliendo sus labores; por otra parte, muchas personas están familiarizadas con Gmail, así que todos estarán en condiciones de usar Google Workspace (antes G suite) desde el primer día.

Comprarle directamente a Google
Google se centra en desarrollar y actualizar las soluciones y sus socios como Nuva se concentran en los clientes. Lo anterior trae muchos beneficios para las empresas puesto que recibirán una atención y asesoría personalizada con una amplia gama de opciones y configuraciones, entre las que destacan: ayudas económicas directamente de Google, demostraciones de productos, capacitaciones, implementación y migración, asistencia con la administración de cambios y hasta tasas preferenciales de TRM. No menos importante es que el cliente obtendrá dos puntos de contacto y condiciones de pago más flexibles.

Seguro surgirán estas y otras dudas más frente a Google Workspace (antes G Suite), pero como en el buscador, en ellas hallarás la respuesta que precisas.

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